El ministro de Economía aseguró que la oferta realizada para salir de default no era para estos inversores especulativos y subrayó que sacándolos la propuesta tendrá finalmente una aceptación del 60 por ciento.
El ministro de Economía Amado Boudou admitió que la prioridad de la oferta del canje de deuda es dejar fuera de la operatoria a los fondos buitres y que el resultado del 45% de aceptación anunciado es "sobre el total de los tenedores de bonos".
Por eso señaló que "el objetivo nuestro era llegar al 60% y vamos a llegar. Eso se va a saber el 7 de junio".
"Siempre dijimos que ésta era una oferta que no era para los buitres", reiteró en declaraciones radiales y dijo que "lo que queda ahora es el tramo de tenedores de bonos menores a 100 millones de dólares".
“En 2005 las asociaciones habían sido hostiles contra las ofertas argentina, con las visitas se esta revirtiendo eso”, destacó Boudou.
Con respecto a las declaraciones de Nicola Stock, un bonista que opinó negativamente sobre la adhesión al canje, el ministro aclaró que "los acreedores italianos no participaron del canje y llevan diez años sin cobrar".
Cuando fue consultado sobre si el aumento de salarios puede generar inflación, el titular de Hacienda explicó que cada sector tiene la posibilidad de negociar en su área, ya que "hay porcentajes de aumento que tienen que ver con la productividad de cada grupo".
“Para nosotros no es un problema que los asalariados ganen más, lo que necesitamos es un mercado interno que desarrolle, que haya consumo y que en responsabilidad cada sector de la economía acuerden entre trabajadores y empresarios los aumentos que vienen siendo distintos para distintas actividades”, sintetizó.
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