La jueza Sandra Arroyo Salgado tiene pendiente ordenar los análisis de ADN de Felipe y Marcela en el Hospital Durand. Según confirmaron a P&M desde Abuelas, esta decisión dependerá de la resolución de Casación sobre un recurso de queja presentado por la defensa de los hijos adoptivos de la dueña de Clarín, en un intento por llegar a la Corte Suprema.
La causa que investiga si los hermanos Noble fueron apropiados durante la última dictadura militar continúa en un largo compás de espera. “Sobre los análisis de ADN no hay un pronunciamiento”, ratificó el abogado de Abuelas de Plaza de Mayo, Alan Iud, al ser consultado por Política&Medios sobre el estado del proceso judicial.
La jueza Sandra Arroyo Salgado, que reemplazó recientemente al polémico Conrado Bergesio, emitió una resolución el viernes pasado para informar que no va a dar curso a la pericia hasta que la Cámara de Casación Penal resuelva si eleva o no a la Corte Suprema un recurso de queja que interpusieron los abogados de la defensa.
“Ése es el criterio que fijó ella, pero nosotros estamos estudiando si vamos a hacer alguna presentación sobre eso”, dijo Iud, mientras que sobre la demora del tribunal superior reconoció que “nosotros esperábamos que Casación lo resolviera la semana pasada y no se pudo”.
Según pudo saber P&M, uno de los jueces que integran la Cámara tuvo un grave problema familiar y esto retrasó el fallo sobre el recurso de queja de los Noble, aunque el abogado de Abuelas subrayó que “Casación ya está en condiciones de emitir una resolución desde el viernes 7. Han pasado 6 días hábiles y esperamos que se expida cuanto antes”.
Iud destacó, sin embargo, que Arroyo Salgado tomó medidas de recaudo con las muestras de sangre de Felipe y Marcela, y recabó declaraciones de los bioquímicos del Banco de Datos Genéticos y del Cuerpo Médico Forense para que se expidan sobre la perdurabilidad de las pericias de ADN.
Con este procedimiento, la nueva jueza mostró más criterio que Bergesio, quien no había tomado ningún recaudo específico sobre las muestras. Sin embargo, para Iud, aún no se puede abrir una valoración sobre la actuación de Arroyo Salgado en la causa.
“Por ahora vemos que se normalizan las cosas en cuanto a la actuación de las partes y a los criterios que fija el tribunal. Después obviamente cada juez de instrucción tiene que respetar lo que dicen los tribunales superiores. En ese sentido, la jueza no podría hacer algo distinto. Incluso Bergesio tuvo que ajustarse a lo que le ordenaba la Cámara de San Martín”, explicó el abogado al recordar que sus “últimas resoluciones fueron en principio favorables a lo que pedía Abuelas”.
De todos modos, no dejó de destacar el apartamiento del juez como un hecho significativo para el eventual esclarecimiento de la identidad de los hijos adoptivos de la dueña de Clarín: “Su actuación era cuanto menos poco diligente y nos parece que de eso no quedan dudas. La actuación de Bergesio distó mucho de lo que se esperaba de un juez federal”, sintetizó.
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